María Fernanda Noboa

María Fernanda Noboa

Psicoterapeuta de Familia y de Pareja

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Celos por la llegada de un hermano

Tengo un niño de 6 años que está atravesando por una etapa de agresividad a raíz del nacimiento de un hermanito. En la escuela me citan a cada rato porque golpea a sus compañeros. ¿Cómo mejorar esta actitud sin que se desquite o sienta celos por la llegada de un hermano? Mónica

Celos por la llegada de un hermano

Querida Mónica Es indudable que la llegada de un nuevo bebé a casa conlleva celos de los hermanitos mayores, lo cual es una preocupación natural, pues el bebé será el centro de atención, no solo de mamá, sino también de papá, abuelitos, tíos y un sin numero de personas que van a casa a conocerlo.  

Con la llegada del hermanito el hijo mayor se siente que pasa a segundo lugar, pues toda la atención a la que estaba acostumbrado a recibir solo cambia completamente, ahora el bebé tendrá mucha atención y el sentirá que debe competir o hacer algo especial para conseguir un lugar. La mejor forma de ayudarlo a superar los celos y las consecuencias de éstos, es darle atención privilegiada. Entiendo que tienes que pasar tiempo con el nuevo bebé, pero tu hijo de 6 años necesita reafirmar que no ha perdido su lugar dentro de la familia, y, aunque esto es obvio para nosotros los mayores, no lo es para él.

Te recomiendo que inviertas tiempo compartiendo juegos a solas con él, como pintar, leer cuentos, jugar con plastilinas o la actividad de la cual él disfrute. Cuando hagas esto delega el cuidado de tu otro hijo y pon el celular en silencio y lejos de ustedes. Pues, si estás pendiente del cell, ya no estarás concentrada en tu hijo.

El necesita tu presencia con tus cinco sentidos, verás como sale adelante y deja de estar agresivo. Pide al papá que también participe en darle un momento especial, intentando mantener las actividades que hacían con él antes de que naciera el hermanito. 

Valorando las características de mi hijo

Seguro tienes una idea de cómo te gustaría que tu hijo sea.  Qué difícil es para los hijos tratar de ser lo que sus padres esperan de ellos, pues en ese camino es muy probable que nunca descubran quiénes son en realidad, ni cuáles son sus dones y fortalezas.

Mirar esta escena de la película Kung Fu Panda nos enseña una gran filosofía sobre reconocer a cada persona con sus propias características y valorarlas.

Intenta ayudar a tus hijos a ser la mejor versión de sí mismos, a que se descubran y florezcan, podrá ser que tu quieras que tu hijo sea un durazno, pero si el es un manzano, nunca será un durazno, pero podrá ser el manzano más lindo que tu hayas visto. Esto es lo que hacemos los padres al educar, llevar a nuestros hijos a convertirse en lo que ellos son, que saquen toda la hermosura que llevan en el interior y se lo crean.  Si los forzamos a convertirse en lo que no son, seguramente fracasaremos en el intento.

Aceptemos que nuestro hijo es un manzano y aprendamos a valorarlo desde lo que él es, sólo así se sentirá amado.

Jugar con tu hijo es un ganar - ganar

El estilo de vida que llevamos hoy en día es agotador y no deja tiempo más que para resolver problemas, cumplir obligaciones, asumir responsabilidades, aumentando de forma considerable el stress personal y por lo tanto familiar, pues lo llevamos a la familia.

Cuando llegas a casa  del trabajo usualmente las obligaciones continúan, pues hay que tomar lecciones a niños, revisar tareas y organizar la cena, convirtiendo tu día en 24 horas de labores, sin dejar un espacio a disfrutar de lo que tienes: "tu familia".


Jugar con tus hijos tiene un efecto absolutamente terapéutico:


1. Te lleva a pensar en tu hijo y en lo que van a hacer.
2. Te relaja y distrae tu mente de aquello que te preocupa.
3. Te vincula de forma espontánea con tu hijo.
4.  Descubres qué le gusta a tu hijo y cual es su forma de jugar.
5. Comparten en un ambiente de alegría.
6. Te permite revivir a tu niño interior, abriéndote a la diversión.
7. Pone en positivo tu estado de ánimo y el de tu hijo.
8. Tu hijo se sentirá amado porque le das tu tiempo Cuando juegas con tu hijo, no existe formula perdedora, es absolutamente un ganar-ganar.

 

No lo dudes, y comienza hoy.  Lo vas a disfrutar. 

Peligro al chatear con extraños en redes sociales

¿Crees que tus hijos preadolescentes o adolescentes serían capaces de chatear con extraños en redes sociales? ¿Crees que serían capaces de aceptarlos en las redes sociales como sus amigos? ¿Crees que podrían llegar incluso a encontrarse luego cara a cara con este extraño al que aceptaron en línea en alguna red social? Seguro respondiste que no a las 3 preguntas.  Mira éste video elaborado por el famoso youtuber Cobin Parsin para que conozcas los peligros al que están expuestos tus hijos.

¿Cuál es el problema real?

  1. Los chicos creen que tener seguidores los hace populares, por lo tanto aceptan en sus redes sociales a cualquier persona que les pide seguirlos o ser sus amigos.
  2. Como quieren ser populares tienen sus páginas abiertas al mundo.
  3. En las redes sociales aunque tengas privacidad cualquiera te puede pedir ser tu seguidor, y si lo aceptas ya está adentro de tu  cuenta y tiene acceso a tu información personal.
  4. En Facebook puedes a través del inbox conversar con personas que no son tus amigos y  que no están en tu lista.
  5. Los chicos no miden el peligro al que pueden estar expuestos al aceptar a la persona extraña a la red social, pues por una parte si la foto les agrada, ya lo sienten cercano, segundo se sienten seguros al ser la relación  virtual lo que  les crea la fantasía de una distancia imposible de acortar.
  6. Cuando se les habla de la posibilidad de un peligro al conversar con extraños ellos piensan que los papás son unos exagerados fuera de la realidad.
  7. Los pedestras y personas que quieren hacer daño si existen y están al acecho en las redes con la única intención de causar daño.  Conocen la vulnerabilidad de los adolescentes y saben que son una presa fácil de convencer.

Posibles soluciones:

  1. Enseña el video a tus hijos.  Ellos solo creerán que el peligro existe si lo ven como una realidad.
  2. Permite que usen redes sociales, respetando los límites de edad que cada red social tiene.  Lo importante no es NO tenerlas, sino saber usarlas.
  3. Revisa que tengan sus redes sociales privadas y con todas las seguridades posibles: privacidad configurada para que sólo mis amigos puedan ver las publicaciones, información personal como correo electrónico y número telefónico oculto, y jamás debe ser publicada!
  4. Insiste en que no deben aceptar solicitudes de amistad de desconocidos, aunque sean adolescentes como ellos.  Si no los conocen no se pueden exponer a su influencia.  Pensar siempre que quienes me envían una solicitud de amistad son desconocidos en la vida real y no son mis amigos
  5. Que te acepten como amigo en sus redes. A ellos no les gusta que los papás los estén mirando ni haciendo comentarios a sus fotos.  Puedes ofrecerles ser silencioso y no estar comentando ni haciendo "me gusta" a ninguna foto, y claro, cumplir la promesa!
  6. Conoce la rutina y el itinerario de tus hijos, es importante como padres saber en dónde están y cuáles son sus actividades.
  7. Desde que son pequeños cultiva confianza y comunicación abierta, es la mejor prevención que existe, pues sólo así lo conocerás y tus palabras tendrán credibilidad.
  8. Conoce cuáles son las redes sociales que ellos usan.  Saber qué usan y para qué usan las redes sociales te ayuda a conocerlos, así como a estar informado cómo se relacionan con sus pares.
  9. Si tu hijo tiene un dispositivo móvil, asegúrate que tenga deshabilitada la opción de Geolocalización (así nadie sabrá desde dónde está publicando)
El hecho de hablar en confianza con un desconocido en internet, no lo convierte en alguien conocido.  Siempre piensa que detrás del computador puede haber otra persona distinta a quien dice ser

Y tú, ¿Que acciones estás tomando como padre para proteger a tus hijos de este tipo de problemas?.  Comparte con nosotros tus dudas y consejos en los comentarios. 

No quiero Crecer, por Pilar Sordo

Pilar Sordo, en su entrevista, nos cuenta que conversando con niños escuchó repetidas veces que decían "no quiero crecer", luego de una investigación ella descubre que los niños de hoy no quieren crecer porque ven en los adultos a una generación triste, quejumbrosa, que no agradece, que no disfruta del trabajo, que no disfruta de la vida.

Ella decide investigar qué está pasando con las familias, con la educación puertas adentro, con los padres de hoy en día.

Pilar descubre en su investigación que a diferencia con generaciones anteriores que soñaban con ser adultos algún día, los niños de hoy no quieren crecer por las inconsistencias que ven en los adultos.  

Mi hijo de 20 años embarazó a su enamorada

Hola, buenas tardes, acudo a ustedes pues hace un mes me entere que mi hijo de 20 años embarazó a su enamorada. Realmente me he sentido muy mal pues a el se le ha dado todo, en nuestras posibilidades hemos pagado un colegio y universidades de estatus medio alto, siento como que el no ha valorado todo el esfuerzo y cariño que le hemos dado como padres, tanto en cosas materiales como espirituales, pues somos una familia católica, me siento como engañada, al ver que para el la prioridad siempre ha sido su enamorada, pues hay muchos detalles que me he enterado que no le puedo contar ahora.

Le escribo para que me de un consejo que debo hacer con este sentimiento, el esta en primer año de Arquitectura, va a seguir estudiando y buscar trabajo medio tiempo, se caso solo civil, pero no convive con la chica, cada cual vive en su casa.

Todavía se le esta ayudando económicamente con los gastos de la chica por el embarazo, si piensan casarse el eclesiástico pero después que terminen un curso de Mas Pareja Católico que prácticamente mi esposo lo indujo que ingresen pues la chica no estaba de acuerdo, este curso dura 8 meses.

Pero realmente no se si este sea la solución pues no los veo gustoso de estar en este curso, más lo veo como obligado porque esas fueron nuestras condiciones como padres para ayudarlos, si no no lo íbamos a ayudar.

Que me puedes aconsejar del tema

N

Mi hijo de 20 años embarazó a su enamorada

Querida N

La situación que estás viviendo es muy difícil, realmente estás decepcionada por las decisiones que tu hijo a tomado, distintas a lo que ustedes esperaban de él, lo cual implica un cambio absoluto de ruta en su vida y su futuro, y como padres, duele.

Una de las situaciones más difícil de ser padres es ver a nuestros hijos tomar decisiones que sabemos, o pensamos no los va a llevar a ser felices, y que justamente, les hará el camino más difícil.  Son momentos en que tenemos que recordar que ellos, en uso de su libre albedrío, tendrán que hacerse cargo de esas decisiones que los llevarán, al éxito o fracaso, alegría o tristeza, y que nuestra labor de padres es la de simplemente acompañarlos en estos momentos, gozando junto a ellos de su alegría o llorando con su tristeza, así como ver que a veces ellos pueden sentirse muy bien con una decisión y nosotros saber la factura que esa decisión les pasará en la vida, pero una vez más, es la vida que ellos eligen vivir de la forma que ellos eligen vivir, y nosotros los padres por más que tengamos el deseo de protegerlos, ya no podemos hacerlo porque es la decisión de ellos, no la nuestra, por lo tanto las consecuencias y responsabilidad de lo que suceda también les pertenece. Son esas ocasiones en que hay que estar cerca y disponibles en caso que pidan ayuda, pues no estamos para resolverles la vida, pero si para ayudarlos cuando ellos lo pidan, en caso que esté en nuestra capacidad hacerlo.  Todo este proceso es doloroso para los padres y es por esto que la relación de pareja debe estar lo más fortalecida posible para poder acompañarse, teniendo en cuenta que el hijo podrá decepcionarlos, pero es su hijo y lo seguirán amando, y es porque se ama tanto que duele tanto.  Te puedo asegurar que este momento pasará, y unos años más adelante lo verás de otra manera, es ahora cuando en medio de la crisis existe la gran oportunidad para aprender de los errores, afianzando y consolidando las relaciones.

Sobre la situación puntual de tu hijo:

Cuando una persona inicia su vida sexual debe tener en consideración la posibilidad de un embarazo, pues es una consecuencia natural de una relación sexual. El problema está en que muchos jóvenes no creen en la consecuencia, es como si fuera un cuento o invento que alguien hizo para meterles miedo y evitar las relaciones sexuales prematrimoniales.  En el momento en que llega el embarazo se dan cuenta que era verdad.

Dentro de tu dolor quiero que puedas darte cuenta que tu hijo y su enamorada están enfrentando la situación y van a tener al bebé, hoy en día son chicos valientes, pues no están abortando, con lo cual se evitarían el problema con sus padres.  Esta es una realidad importante para tomar en cuenta, siempre será mejor tener la decepción por su comportamiento, y tener un bebé en casa, que luego enterarte que tu hijo abortó con lo cual tendrás infinita decepción.

¿Cuánto ayudarlos?

Es importante escucharlos, y dentro de lo que ellos quieren sugerir lo que ustedes creen que es mejor para ellos.  Tu hijo tiene solo 20 años, esto quiere decir que todavía no tiene su corteza prefrontal terminada de formar, esto es el lugar del cerebro en dónde están las decisiones.  Por esto es que a esa edad es vital que los padres guiemos, o digamos lo que pensamos, con la esperanza que escuchen, pues si necesitan todavía en algo del adulto a su lado.  Usualmente solo puedes imponer algo, cuando eres tú el que paga la cuenta... pues ahí no depende de ellos, pero en estas circunstancias es mucho más saludable para todos intentar consensos, acuerdos para lo cual es necesario escucharse todos, para luego, tomar decisiones inteligentes, prudentes, adecuadas y aterrizadas a la realidad.

Encuentro muy importante que tu hijo siga estudiando, pues ahí está su futuro.  Que casados civil cada uno viva en su casa es también una decisión acertada, pues ellos podrían perfectamente seguir como enamorados, cada uno en su casa, permitiendo ganar en madures, afianzando la relación, para luego de un tiempo, incluso, luego de que nazca el bebé, tomar la decisión o no del matrimonio eclesiástico que es para toda la vida.  Haber puesto el curso de 8 meses como requisito para la boda, aunque a ellos no les guste, es también acertado, pues habrán muchas cosas que a ellos les incomode o no les guste, pero para que ellos maduren es importante que asuman responsabilidades, e ir a un curso implica esto.  Lo que sí podrías hacer distinto es ofrecerle que elija entre dos cursos distintos, para que elija el que ellos quieran dentro delas opciones que ustedes les presentan, pero que el curso va, es una realidad.

No dudes en seguir consultando esta situación familiar, que nosotros con gusto colaboraremos en lo que necesites.

¡Un abrazo y adelante!

Diferencias entre Concuñadas

Tengo una concuñada que cada vez que nos reunimos por algún cumpleaños, ella le insinúa a mi esposo q cuando mi hija crezca todo lo que ha hecho lo va a pagar con ella. No se si es envidia porque ella quiere tener niña y no puede solo tuvo un hijo, mi bebé tiene 1 año es la más pequeña y por eso lleva bastante atención de todos que yo lo veo normal porque está en el aprendizaje de caminar, hablar etc.

Pero la forma de decirlo de ella es como odio y como que si por ella fuera los deseos para mi hija es q tenga una adolescencia destruida. Ella conoce q mi esposo fue un hombre mujeriego y sabe q me fue infiel con su cuñada. Pro todo se dio hasta en su casa por lo poco que me pude enterar. Que debo hacer, enfrentarla?? La verdad no me gusta como se refiere a mi hija de q cuando sea adolescente va a ser una loca.  Mi esposo no le pone un alto y ella no es una santa también le ha sido infiel a mi cuñado varias veces todos nos hemos enterado y no creo q quiera q alguien le diga q su hijo va a pagar sus actos.

Ayúdeme por favor el 5 de octubre toca otra vez reunión familiar por el cumpleaños de mi suegro, por lo tanto tener q soportarla a ella y la hermana q es mi otra concuñada.

Carolina

Estimada Carolina

La relación con la familia política es usualmente delicada, con lo cual no quiere decir que pueden ofenderte y debas permitirlo por la paz familiar, pero sí hay que elegir muy bien, y con mucho tino, la forma de poner límites a las situaciones que te son tanto incómodas como ofensivas.

En primer lugar es importante que tu esposo conozca que la situación te molesta mucho .  Te recomiendo que lo converses con él, teniendo mucho cuidado de no caer en ofensas y reclamos a su familia, ni juicios de valor, haciéndolo sentir mal, abriendo la puerta para que el se resienta contigo, sino, un diálogo en el que le digas lo que a ti te molesta, cómo te sientes cuando hablan de esa manera en contra de tu hija, habla sobre tus sentimientos y el trato que te gustaría recibir, para que puedas lograr la empatía de tu esposo.  Una vez que tu esposo tenga claro cómo tu te sientes y lo que tu quisieras conseguir habría que tomar una decisión sobre qué hacer en conjunto con tu esposo para en equipo lograrlo.

Que tu te enfrentes a tu concuñada me parece que podría ser peligroso, pues no sabes como ella va a reaccionar, y si va a ofenderte y faltarte el respeto de tal forma que el problema se haga más grande.  Lo que sería recomendable es que tu esposo hable con su hermano y le diga que le pida a su esposa que evite estos comentarios, porque estos van contra su hija, sin importar su pasado, pues esto solo le pertenece a él, nadie tiene porque profetizar cual será la vida futura de su hija, y de esta manera pide respeto básico y elemental que debe existir en una familia para que se puedan llevar en paz y armonía.  Siempre es mejor que el problema se aborde entre los miembros de la familia, que entre los políticos, ellos son los hermanos, saben como reaccionan y cómo manejar el problema sin llegar a una mayor confrontación, pues este es un tema que debería poder tratarse en un marco de respeto absoluto.  Pedir a un hermano que su esposa respete a su hija, no debería herir ni ofender, para esto será necesario que hable del echo puntual que disgusta y no de las personas.  

Sería de esta manera: “ Cuanto tu esposa hace este tipo de comentario sobre mi hija, a mi y a mi esposa nos hiere, la bebe es una niña pequeña y merece el cariño y respeto de todos, estoy seguro que tu me entiendes y podrás hablar con tu esposa para que deje de hacer estos comentarios”, y con eso terminar la conversación, pues no hace falta tocar ningún otro tema, de si en el pasado fue infiel, o si ella también, o que hizo cada uno, eso no interesa en este momento, lo que único que interesa es dejar de pronosticar el futuro de su hija en base al los errores de su padre, pidiendo respeto.

Espero que todo salga bien, y puedas tener reuniones familiares más placenteras.

Mi pareja ve fotos de mujeres semidesnudas

Que hago si encuentro que mi pareja ve fotos de mujeres semidesnudas en su celular. Ya hemos conversado al respecto en otras ocasiones pero se vuelve a repetir. Me molesta tanto que ya no quiero ni siquiera verlo. Cecilia

Estimada Cecilia

Realmente entiendo tu malestar. Hay muchos hombres que tienen la costumbre de tener fotos de mujeres semidesnudas en los celulares, pero eso no quiere decir que debas aceptarlo. Trata de conversarlo nuevamente diciéndole como te sientes con el hecho que el tenga ese tipo de fotos y como esto perjudica a la relación. Intenta comunicarle tu desacuerdo con tranquilidad. Si tu le reclamas o manifiestas tu malestar desde la rabia y la impaciencia, el verá una mujer enojada y no le dará importancia al hecho de las fotos, sino a tu mal genio o desagrado. Por eso es muy importante que cuides de la forma en que te expresas. El tema principal es que él ve esas fotos, no que tu las hayas encontrado, pero debes de preguntarte porqué necesitas revisar su celular. Las relaciones implican un nivel importante de confianza, que al revisar su celular estás diciéndole que no confías en lo que el guarde en su smartphone, o con quién o que hable. Te agradezco la confianza puesta en nosotros.

La adolescencia: preguntas frecuentes

Para poder entender a los adolescentes y atravesar junto a ellos esta etapa de la vida de la mejor manera es muy importante tener claro cual es el sentido de la adolescencia y cuales los cambios más importantes. Definitivamente esto es lo que nos ayuda a los padres a no enfocarlo como un problema, sino a prepararnos para ser los mejores guías en su travesía. Transitar de la niñez a la adultez no es tarea sencilla, y es entre los 12 y 19 anos en que iniciamos esa etapa de transición que nos prepara para ser adultos. Es una etapa en la que además de los cambios físicos, conocidos por todos, hay un cambio a nivel del pensamiento, en la que desarrollan una gran capacidad de reflexión que lleva al adolescente a la formación de su identidad personal, a descubrir quién es, a desarrollar su autonomía y por la tanto alcanzar una nueva madurez. Esto implica una crisis de crecimiento, a través de la cual deben adaptarse a la nueva edad, y como es natural, surgirán dificultades, hasta que aprendan a vivir en ésta nueva edad.

1. ¿Por qué poner límites? ¿Qué otorgan los límites a los adolescentes?

Los límites nos educan, nos crean un marco de referencia en el cual podemos movernos, nos ayudan a desarrollar la voluntad y el autocontrol emocional, nos dan seguridad de cual es el camino correcto, regulan la convivencia diferenciando los espacios propios de los de los demás, nos permiten desarrollar el sentido moral, el buen uso de la libertad, el respeto y la responsabilidad, nos permiten sentirnos amados, pues hay alguien que se preocupa por nosotros lo suficiente como para incomodarse y sostener esos límites. Solo si tenemos límites podemos convivir con las otras personas en armonía. Los límites les permiten a nuestros hijos tener un modelo de padres, un estilo de familia. Los límtes son indispensables en la vida de toda persona, pero no podemos esperar a que sean adolescentes para ponerlos, estos no se improvisan, hay que empezar desde que son pequeñitos, así cuando sean adolescentes, no solo que los límites les serán naturales, sino que además, están más preparados para autogobernarse. Para poder desarrollar la personalidad se necesita de referentes claros y sólidos.

Un niño que crece sin límites, seguramente será un adolescente con trastornos de conducta.

2. ¿Cómo ponerle límites? ¿Cómo lograr que los respeten?

Recomiendo que en primer lugar los padres lleguen a un acuerdo sobre cuales son los límites que pondrán a sus hijos, para que puedan actuar como un equipo educador. Los limites deben ser claros, y los necesarios en temas específicos. Si nosotros queremos que tengan referentes para que puedan crecer como personas autónomas que usen correctamente su libertad no podemos convertir absolutamente todo lo que rodea su vida en normas, pues lo más probable es que desobedezcan una gran mayoría por sentirlas rígidas y exageradas. El exceso de normas les da la sensación que sus padres no confían en ellos y además que los creen incapaces para actuar con algo de independencia. Los límites son marcos de referencia, en ésta edad, los límites tienen que ver básicamente con horarios y permisos para salir, uso de aparatos electrónicos, rendimiento escolar y respeto a los padres y miembros de la familia. En la medida en que hayan crecido con éstos será natural que los respeten, sobretodo si los sienten coherentes a su edad y madurez.

3. ¿Cómo negociar con un adolescente?

Siempre habrá temas que no son negociables, que tienen que ver con los valores familiares, pero habrán otros temas que se podrán negociar. Para esto debemos estar claros en que es un tema negociable y cual no. Es positivo escuchar que tienen ellos que decir y cuales son los puntos en que sustentan su argumento. Si nos parecen válidos y no van contra los valores familiares, podremos acceder, pero si nos parece que es una manipulación o un capricho debemos sostener nuestro punto de vista por difícil que esta tarea parezca. Los temas en los cuales ellos piden negociar con más frecuencia tienen que ver con los permisos para salir y con la hora de recogida en una fiesta.

4. ¿Es bueno que participen en la fijación de reglas?

Hay reglas que no deben ser negociables, pero hay otras en las cuales les podemos preguntar a ellos que es lo que les parece conveniente, que opinan de esa regla, y esta opinión nos sirve como punto de partida para ser flexibles si nuestra opinión se encontraba en un extremo opuesto. Esto sirve mucho para las horas de regreso de las fiestas, si para un chico de 15 años los padres lo recogen a las 12:30 y el chico pide 2:30am porque a esa hora recogen a sus amigos, los padres podrán correr su permiso para la 1:30. Escuchar su opinión y tomarla en cuenta cuando es válida promueve que ellos se sientan escuchados y valorados como personas con criterio, piensan “soy confiable para mis padres, mi opinión importa”, a veces decidir así hace que todos ganemos, pues se toma en cuenta la petición del hijo dentro de la macro norma impuesta por los padres, manteniendo la autoridad intacta.

5. ¿Qué pasa con los extremos: ser muy permisivos o ser muy estrictos?

Existe una creencia en nuestros tiempos según la cual los padres que aman son los que permiten todo, dan todo tipo de gustos, para que los hijos puedan ser felices. Por otro lado están los padres que en oposición a los primeros son radicalmente estrictos. Ninguno de los dos extremos educan, el primero crea hijos débiles sin voluntad, muy desorientados, pues han crecido sin referencias claras, con baja autoestima e inseguros, el segundo, que radica básicamente en un exceso de control y rigidez, lleva a los hijos a sentir que sus padres no confían en ellos, promueven la rebelión, se corta el diálogo y se distancian padres e hijos.

El gran reto es ser padres valientes que ejerzan la autoridad, poniendo límites claros y suficientes.

6. ¿Cómo repercuten los gritos a la hora de imponer disciplina a un adolescente?

Los gritos solo sirven para que perdamos la autoridad y el respeto, frente a nuestros hijos. Son realmente la expresión del descontrol personal y la frustración que los padres podemos experimentar en cierto momento de enfrentamiento con un hijo. Para educarlos en autocontrol, primero debemos ser coherentes en nuestro comportamiento, aprender a contenernos, si nosotros gritamos, ellos también lo harán, pues lo habrán aprendido de nosotros.

7. ¿Se debe guiar, pero no controlar a un adolescente?

El control de padres a hijos es algo que debemos aspirar a ir retirando de la vida de ellos en la medida que van creciendo. El autocontrol es expresión de madurez y de que están listos para autogobernarse. Cuando los niños son pequeños, se los controla mucho, es la forma de educarlos, luego en la medida en que van creciendo vamos cediendo a ellos el control y éstos lo van asumiendo. De lo contrario estaríamos educando chicos inmaduros, irresponsables y dependientes, incapaces de tomar decisiones propias. Debemos tomar en cuenta que la mejor forma de guiar a un hijo es la de ser coherentes en nuestros comportamientos, ser referentes claros. Ellos nos están observando todo el tiempo, somos los modelos con los que ellos confrontan el mundo que ven afuera de la casa, y a partir de donde van construyendo su personalidad.

8. Ejemplos puntuales. Hasta dónde y cómo poner límites con:

  • Horarios.- Para poner horarios es indispensable conocer a nuestro hijo (hay chicos muy tímidos que les vendría bien un horario más flexible, pero si son chicos extrovertidos que nunca se conforman con ninguna regla, éstos deberán ser mas bien rígidos), saber con qué estamos de acuerdo y con que nó, conocer cuales son los horarios comunes entre los amigos y coherentes a la edad.  Por ejemplo, a los 12 anos se va al cine de las 2h00pm, no a las 6hoo de la tarde, cuando se tienen 15 anos ya se puede ir al cine más tarde, y a los 18 a la última función, así es en todos los aspectos, de menos a más, de acuerdo a la madurez y ganándose la confianza de los padres. A mayor madurez, mayor libertad.
  • Apariencia.- La apariencia es un medio a través del cual los jóvenes expresan su identidad, pero esto no quiere decir que sea una vía libre para que hagan todo lo que ellos quieran. Los padres como guías debemos fomentar que se sientan cómodos y desarrollen un estilo propio, no el nuestro, sino el de ellos, pero dentro de unos límites. Que importante es educar la apariencia, no porque algo esté de moda, y son jóvenes, o sea su estilo, se debe permitir todo. Si nuestra hija quiere salir de casa con un vestido diminuto, por más que la moda sea mini, habrá que tener un límite con lo que se ensena. Debemos elegir las batallas, ser firmes en lo que realmente es importante, pues corremos el riesgo de desgastarnos en insistir que nos gusta más como se los ve con la camisa a rayas que acabamos de comprar y pretender que la usen, en vez de permitir que se pongan la que a ellos le gusta.
  • Amistades.- En ésta etapa de la vida, los amigos tienen un rol preponderante en la vida de nuestros hijos, ellos intentarán llenar todos sus espacios libres con la compania de éstos, y si los padres no ponemos horarios, simplemente, no los veremos más. Hay que establecer tiempo para amigos y tiempo para la familia.
  • Enamorados (as).- Hay chicos más enamoradizos que otros, pero es la etapa natural para fijarse en el sexo opuesto y tener enamorados. Como en todos los otros aspectos el hecho de tener o no enamorado, y la frecuencia de los encuentros, tendrá que ver con la edad y madurez. Si un chico de 14 años tiene una enamorada, seguramente se verán cuando vayan al cine con todos los amigos, o a una reunión, si son mayores de 17, querrán verse más a menudo, por lo tanto los padres tendrán que establecer horarios de visita, y establecer reglas sobre ésta (tiene que estar uno de los padres presente en la casa, y se recibe la visita en la sala, no en el cuarto). Con relación a los enamorados hay que cuidarse mucho en como se plantea el tema en casa, pues cuando se sataniza el tener enamorados, lo más probable es que elijan una relación a escondidas, siempre será mejor que lo hagan de frente con el conocimiento de los padres.
  • Uso dispositivos electrónicos (celulares, computadora, internet).- Los medios interactivos son la forma como los adolescentes se comunican, y requieren un límite, de la misma forma en que hace 20 años se lo hacía con el uso del teléfono. Estos límites deben estar claros. Por ejemplo, el celular no se lo lleva a la mesa, se lo apaga en la noche a la hora establecida por los padres, hay muchos chicos que esperan que los padres se duerman para mensajear por el chat con los amigos a altas horas de la noche, si ellos no han aprendido a controlarse, los padres pueden confiscar los celulares en la noche y entregarlos en la mañana, establecer horarios para su uso, si desde los 12 años tienen uso ilimitado de estos recursos, cuando lleguen a los 18 no sabrán como controlarlo, y seguramente pasarán horas ilimitadas al frente de una pantalla. Inicialmente el control deberá ser establecido por los padres, y poco a poco, al demostrar el chico que hace buen uso de estos recursos, los padres podrán ir disminuyendo estas reglas porque el hijo ya las habrá hecho propias.

Listo para dejar el pañal

Cuando somos mamás por primera vez hay ciertas dudas o preguntas con no hacemos constantemente que coinciden entre casi todas nosotras.  Una de esas dudas es si mi hijo estará listo para dejar el pañal y cuál será el momento adecuado para hacerlo. A la inseguridad natural que podamos tener hay que añadirle las opiniones de la mamá, suegra o tía mayores, que en muchas ocasiones tienen alguna experiencia o anécdota de algún hijo al que quitaron los pañales y controlaba esfínteres a muy temprana edad, siendo este comentario contrario a la literatura que has encontrado sobre el tema.  Estos comentarios no solo confunden, sino que crean presión para que hagas las cosas tal cual ellas lo hicieron en su momento, muy a menudo con un pensamiento implícito, que si no lo haces es porque eres floja, perezosa, por lo tanto mala madre, pues tu bebé podría estar atrasándose en su desarrollo porque tu no te atreves.

¿Cuando está listo para dejar el pañal?

Usualmente los bebés al rededor de los 2 años (24 meses) están listos biológicamente para poder controlar esfínteres, aunque esta edad no es exacta para todos los niños, pues hay niños que maduran en distintos momentos  considerándose esta edad un punto de partida desde cuando podrían ya estar listos, para controlar, y por lo tanto para que tú inicies su entrenamiento en dejar el pañal.  No hay apuro, podrás atrasar este entrenamiento unos meses sin que haya ninguna repercusión negativa. ¿Cómo sabes que ya está listo? Ellos empiezan a tocar el pañal como señal que han hecho SS, o te anuncian que ya han hecho SS diciéndotelo, y pidiéndote un cambio de pañal. Primero controlan el intestino y luego la vejiga.  Si notas que tu hijo no está listo,  será mejor que atrases el proceso. Usualmente si hasta los 3 años no logra controlar sus esfínteres será necesario que  consultes con tu pediatra. El pañal de la noche es otra historia, pues primero deberás entrenarlo para que use la bacenilla durante el día,  observando durante las mañanas si el pañal de la noche amanece seco o mojado.  El momento en que tu niño amanezca con el pañal seco, estará listo para que se lo quites, lo que puede suceder cerca de los 3 años.

¿Cómo iniciar el proceso?

  • Observa si tu hijo te da señales que siente ganas de orinar o de hacer SS
  • Si notas que ya esta consciente de esta sensación mira tu calendario para saber si tu cuentas con el tiempo para iniciar el proceso.
  • Comenta con tu pareja que has observado que tu hijo está listo y pídele que se sume al proceso.
  • Cuéntale a él que van a iniciar el proceso.
  • Si fuera posible sal a la tienda con él a comprar una bacenilla y unos calzones, dale a elegir entre dos modelos cuál le gusta más.
  • Compra un cuento sobre un niño que está dejando el pañal
  • Una vez que le sacas el pañal del día NO hay vuelta atrás.
  • Lee la historia del niño del cuento que has comprado y dile que él ha crecido y está listo para hacer lo mismo.
  • Despide junto a tu hijo al pañal del día y dale la bienvenida a los calzones y bacenilla.
  • En los días que inicias el entrenamiento lo recomendable es que le des de beber agua abundante y que estés en casa con él. Evita salir a la calle con él si no hay necesidad.
  • Procura estar tranquila, en calma, si no lo contagiarás de nervios o presión por lograrlo rápido.
  • Recuerda que tu hijo tendrá su propio ritmo, no lo presiones, ni lo retes si tiene un accidente.
  • Espera 1 hora y algunos minutos luego de tomar agua y lo llevas a sentar a la bacenilla, así si es que orina, el empezará a reconocer la sensación y empezará a avisar.
  • Primero reconocerá las sensación de hacer SS y más adelante  la de orinar, pues muchas veces orinará  casi automáticamente luego de hacer SS aprendiendo así a conocer cuando se llenó la vejiga y es hora de orinar.
  • Cuando te diga que quiere ir a la bacenilla, llévalo, no lo retrases o te distraigas con otra cosa, el necesita que sea rápido.
  • Cuéntale a los familiares cercanos y en el jardín para que te apoyen si fuera necesario
  • Es importante que sea una experiencia agradable en la que se anime a que tu hijo logre controlar sus esfínteres.
  • Cuándo tenga un accidente y no llegue a la bacenilla no lo reproches, anímalo a seguir diciéndole que esta vez tuvo un accidente, pero que seguro la próxima llegarán.
  • Vístelo con prendas fáciles de retirar, aunque al inicio del proceso será más sencillo que vista el calzón y una camiseta, para ser rápidos al momento de llegar al baño.
  • Muéstrale confianza en que sí puede hacerlo.

¿Qué hacer con la presión familiar?

Tendrás que tener mucha paciencia con la familia que te cuenta esas experiencias fantásticas de niños prodigio que pudieron avisar antes de los 24 meses.  La mejor opción para lograr esto es tener seguridad de tí misma y del proceso que has decidido seguir.  Para lograr esto es útil tener la opinión de tu pediatra, pues así les podrás decir que él así te lo ha sugerido, y si no fuera posible, apóyate en la literatura que existe sobre éste tema.  La confianza y seguridad en ti misma será clave en el proceso. ¡Que te vaya muy bien!

 

 

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